lunes, 5 de diciembre de 2011

El Peligro En Las Carreteras Está En El Noroeste

Las vías de Caravaca, Moratalla y Calasparra concentran el mayor número de víctimas mortales en el periodo estival y en lo que va de año
OLGA LÓPEZ/ ENRIQUE SOLER
Seis personas han fallecido en las vías de la comarca en los dos últimos meses, de las once personas que han perdido la vida en la Región desde que empezó el periodo estival. Ayer mismo, un camión y una motocicleta se vieron involucrados en un accidente en Caravaca de la Cruz, a la altura del polígono industrial Cavila. Tras el choque de ambos, los dos conductores resultaron heridos leves.
Además, el siniestro más grave en lo que va de año se produjo en una carretera del Noroeste, en la RM-714 de Calasparra, donde cinco jóvenes perdieron la vida el pasado 8 de febrero al colisionar frontalmente las dos furgonetas en las que circulaban de camino al trabajo.
La elevada cifra de accidentes en las carreteras de Caravaca, Calasparra, Moratalla, Cehegín y Bullas –localidades que componen la comarca del Noroeste–, abre el debate sobre la seguridad de las vías en esta zona. Los conductores habituales de las vías peligrosas del Noroeste relacionan la poca visibilidad en los cambios de rasante, en incorporaciones a la vía y en cruces peligrosos, con el elevado número de accidentes.
La velocidad máxima establecida en estos tramos es de 60 kilómetros por hora, y la Guardia Civil realiza casi diariamente controles, que se saldan con un elevado número de conductores sancionados, según fuentes del Cuerpo.
A la cabeza del ranking de las carreteras que registran más accidentes de tráfico se sitúan la RM-714 que une Calasparra con la Venta del Olivo, y la RM-730, que comunica Caravaca con la pedanía de Barranda, concretamente en el tramo de la Puebla de Don Fadrique.
Las carreteras de acceso a las pedanías de Moratalla; al Campo de San Juan, Benizar, Tazona, Otos y Requena, registran un elevado número de accidentes de tráfico, por la precariedad de las vías, que tienen graves carencias en sus infraestructuras. Desde la construcción hace casi una década de la autovía del Noroeste, que une Caravaca con Murcia, ya no se producen accidentes en la subida del puerto del Caracolico desde Caravaca a Moratalla, que eran frecuentes y en un elevado porcentaje mortales. Con la autovía, se creó una variante que evita ese peligroso tramo.
La construcción de la autovía también repercutió en el descenso de accidentes en la carretera que une Caravaca con Cehegín, conocida popularmente como el ´empalme´. Decenas de personas han perdido la vida en ese tramo, pero con la autovía, la mayoría de los conductores evita el paso por esta carretera, lo que conlleva un descenso de siniestros.
Cehegín concentra la mayoría de sus accidentes de tráfico en la pedanía de Canara, en una zona donde se ubican los invernaderos del clavel, base de la economía de esa localidad. La localidad del Noroeste que menos accidentes registra es Bullas, puesto que cuenta con acceso directo a la autovía y sus carreteras secundarias son poco frecuentadas.

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